Cuando incluimos ciertos alimentos y productos dentro de nuestra alimentación o dieta diaria, además de pensar que nos ayudarán a adelgazar, si ese es nuestro propósito, es bueno conocer las propiedades y los beneficios que éstas tienen para nuestra salud y organismo.
Hace tiempo estaban olvidadas, pero actualmente las frutas tropicales están muy presentes en nuestro mercado, y por tanto, en nuestra alimentación. La parchita es una fruta cítrica con un sabor ácido pero con un contraste dulce que la hace muy jugosa. Es una fruta que se puede tomar sola, en zumo o como ingrediente en otro tipo de platos como pueden ser ensaladas, ya que aporta un sabor diferente y especial.
Al ser una fruta con altos contenidos de vitamina A y C, ayuda a eliminar los radicales libres que dañan nuestro organismo, reparando los tejidos del cuerpo y a fortalecer los huesos. También, gracias a estas vitaminas es un alimento muy apropiado para prevenir enfermedades cardiacas. Sus semillas contienen mucha fibra por lo que nos ayudará a tener una mejor digestión.
La parchita es una fruta adecuada para deportistas ya que es rica en azúcares, carbohidratos y fitoesteroles, éstos últimos son reductores naturales del colesterol. En personas que tienen algunas afecciones respiratorias, es buena ya que por ejemplo, ayuda a aliviar las sibilancias propias del asma, así como la tos que provoca.